El Sueño de una Palabra

Dia a dia nos encerramos en nuestras infinitas mentes y poco a poco... Morimos de Dolor en lapsos Silenciosos.

Wednesday, October 24, 2007

Una realidad Falsa

Imágenes reales y distorsionadas en los ojos de nuestras almas podemos tener, la mente ya no distingue entre el placer y el dolor, somos cigarros consumiéndonos en ceniceros de papel. Acaso no somos seres concientes por convicción o depende en que estemos pensando, o no será que nuestras verdades son por conveniencia o depende en que queremos pensar.

Dejar de vernos en espejos de humo, ser únicos y no falsos, sentimentales y no caer en el desprecio, tener un conocimiento tangible para que los ojos ya no se drenen más en este mundo de cristal, donde el horizonte a lo lejos e inalcanzable siempre estará, un pensamiento de superación o simple y melancólica depresión. Dejar de soñar despiertos, que los sueños pertenecen a la imaginación y esto es la vida real, una cruda verdad; por eso hagamos de nuestros sueños algo a lo que nos podamos sujetar…
…soñar y nunca dejar de caminar…

Tuesday, October 23, 2007

¡Can Ohtli! ¡Donde Camino!

Nan nantli Sara, tlahco ih cemilhuitl tlacati,
Yeh mahuiztictlacatl yolcatl Nahui, intenco niaz,
Thantec neh ometetl cateh omocualli,
nehua aic iztacuahuitli...

"Nehua Itlatol Temictli".



De mi Madre Sara, al medio día nací,
El gran señor animal Nahui, a su lado voy,
Dentro de mi piedra dual existe el mal,
Soy el árbol que no duerme...

"Soy el Sueño de una Palabra".

Tuesday, October 16, 2007

adios al Ayer

...la divina muerte de un segundo
nos recuerda anhelos perdidos,
sueños enigmáticos con demasiadas variantes
sin un sustento tangible al cual sujetarnos,
solo somos marionetas de nuestros pasos
obedecemos a los espasmos mentales
de nuestra psiquis deformada,
una ceguera irracional
nos niega los colores de la verdad,
nuestros mundanos sentimientos
irradian una peste emocional
de cada gota de sudor,
impulsada por un temor,
un temor reconocibles y abstracto,
perdurables entre gotas de licor,
mares delirantes, playas blancas
y palmeras sangrantes de dolor,
y es que un segundo ha muerto
hoy nadie lo
recuerda, hoy nadie lo sueña,
solo me queda decir:

"Adios al ayer”.